Pequeños gigantes
¿Te pasa que tienes una meta pero la ves taaaan lejana que llega un punto donde mejor te rindes? A todos nos pasa y es súper frustrante, lo sé.
Hoy te voy a platicar sobre el sorprendente mundo de los pequeños buenos hábitos. Una filosofía que nos ayudará a alcanzar más fácilmente todas las metas que nos proponemos.
¿Qué te parecería si te digo que no es la meta lo que está mal? Sino que nuestra perspectiva y el (poco) tiempo en el que queremos alcanzarla. La netflix somos humanos que queremos todo rápido y fácil ¿apoco no?
Es súper normal creer que un enorme éxito requiere de una acción igual de enorme, cuando en realidad no tiene que ser así; ¡los pequeños cambios son la clave!
"¿Grandes metas con pequeños cambios? eso si me interesa"
Muchas veces los pequeños cambios son casi imperceptibles a simple vista y parece que no hacen ninguna diferencia, peeerooo a la larga son los que aportan para lograr gigantes metas.
A ver, imagina que hoy el doctor te dice que tienes que bajar más de 10kg para estar saludable, ¿parece súper lejano no? "¡10kg! ¿cómo carambas los voy a bajar?, ¿con dieta?, ¿cuánta dieta?, ¿con ejercicio?, ¿cuánto ejercicio? ¡¿cuándo lo voy a lograr?!”
¡Ahí precisamente es donde está el negro del arroz! nos preocupamos más por cuánto nos vamos a tardar en lograrlo que en, poco a poco, empezar a lograrlo.
¿Qué pasaría si en vez de preocuparnos por cuánto nos vamos a tardar y cuánto nos va a costar hacerlo, nos ocupamos por avanzar 1% cada día? Los cambios de hábitos son para siempre así que lo que inicia un día como un cambio pequeño se transforma en algo enorme y para siempre, ¡así de poderosos son!
Pero ojo, que esto aplica tanto para buenos como malos hábitos. Así que cuida bien esas pequeñas acciones porque en un abrir y cerrar de ojos te pueden llevar (o alejar) a tus grandes metas.
¿Y tú qué hábitos quieres tener?
¡Mucho que reflexionar el día de hoy! Un buen consejo te doy, porque tu amiga Mafer soy.